Capítulo 7 : Nada que perder.

Cuando llegamos al veterinario, le explicamos a una mujer que había en el mostrador para atender a las personas e hicieron pasar a mi perra.
Nos dijeron que nos podíamos sentar en unos sillones , por cierto , eran unos sillones feísimos, super horteras , pero bueno, ¿Qué le vamos a hacer? Todo el mundo no tiene un muy buen gusto.
Al cabo de media hora o así que le estuvieron haciendo pruebas a mi perra, nos llamaron para darnos los resultados. ¡Se trataba de un embarazo! ¡Qué contentas nos pusimos mi madre y yo! Mi perrita iba a tener crías.
Marchamos a casa para contárselo a papá y a mi hermana Alba. Llegamos a casa y fui corriendo a la habitación de mi hermana a contarle todo lo ocurrido.
- ¡Alba, nuestra perra va a tener crías! le dije yo.
- Bueno... vale... eso está bien. Me contestó ella.
- "Mmmm..." Haber que te pasa... - Le puse la mano en la frente y le dije:
-¡Oh , eso es grave, PROBLEMAS DE AMOR! le dije yo.
- Quita, quita tu no sabes nada Alicia ¡Solo te crees una sabionda y en realidad no sabes NADA! me dijo ella.
-Mira Alba, no es por nada pero te llevo conociendo ocho años y como comprenderás te conozco y también tengo experiencia. Lo creas o no, yo he sufrido mucho por amor, ¿Sabes? le respondí yo a ella.
-Vale... Es un chico... ¡Pero por favor, no le digas nada a NADIE! me dijo ella.
-Vale, solo dime ¿De qué chico hablamos? le dije yo.
-Pues verás se llama Jose.
- Vale, pero dime, ¿Qué problema tienes? añadí yo.
-Es que no sé, no me mira, no me escucha, no quiere nada de mi y eso me fastidia y me duele. me contestó ella.
-¡¿Con qué esas tenemos, no?! Pues ahora toca lo que yo le llamo... EL QUE A HIERRO MATA, A HIERRO MUERE. Es decir, si el se comporta así contigo, tu también lo harás y ya verás como acabará a tus pies , Albita. Bueno adiós fea. le dije yo.
Cuando llegué a mi cuarto vi todo destrozado y empecé a decir:
¿¡Pero bueno, quién ha hecho esto!? Esto parece una pocilga.
De repente, giré la mirada hacia un cojín y vi a mi gata Daisy, estaba dormida, llena de plumas, ¡Pues se había cargado algunos cojines!
Cogí inmediatamente a Daisy y la llevé a su cuartito y me puse a recoger mi cuarto, pero cuando estaba recogiendo las cosas del armario vi una carta.
Decía así:
-Querida Alicia, quería recordarte que tal vez la perfección no exista pero tu eres lo que más se acerca a ella. Eres TODO para mi, firmado tu admirador secreto.
-¡Tengo un admirador secreto! ¡Qué "chachi"! - dije yo.
Al inmediato recibí un sms que ponía:
Te quiero y eso es lo que cuenta desde un número privado.
-¡Vaya como me quiere el chico este! dije yo.
Mi madre me pidió que fuese a por pan así que me dirigí hacia una pequeña tienda que había cerca de mi casa y me encontré a Dani.
-¡Hola Alicia! ¿Dónde vas? me dijo el.
-Pues iba a la pequeña trastienda, ¿Y tu? le contesté yo.
-Pues estaba sacando a mi perro, oye quería preguntarte esto si... ¿Podrías venir mañana viernes a el restaurante Pizza sobre las nueve de la noche? me dijo Dani.
- Dalo por hecho, cariño ¡Digo Dani! jejeje... le dije yo.
-¡Adiós Ali, cuídate! me dijo el a mí.
-Lo mismo te digo Dani. le contesté yo.